No hay nada como la Experiencia
Nosotros podemos usar un ejemplo que es muy fácil de entender, de una mandarina o la fruta durian. Si hay alguna persona que no ha comido una mandarina o una fruta durian, no importa cuántas imágenes o metáforas le demos a él, no podrás describir la realidad de esas frutas. Sólo puedes hacer una cosa: darle a él una experiencia directa. Tú no puedes decir: “Bien, la fruta durian se parece un poquito a la jaca (jackfruit) o como la papaya.” No podrás decir nada que describa la experiencia de conocer la fruta durian. La fruta durian va mucho más allá de todas las ideas y nociones. Lo mismo sucede con una mandarina. Si tú nunca has comido una mandarina, por mucho que la otra persona te quiera y tenga afecto por ti y quiera ayudarte a entender sobre el sabor de una mandarina, él nunca tendrá éxito en describírtela. La realidad de una mandarina, va más allá de las ideas. Nirvana es lo mismo; es la realidad que va más allá de las ideas. Es porque nosotros no tenemos ideas acerca de nirvana, lo que causa en nosotros sufrimiento. La experiencia directa, es el único camino.